Trump y el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, han discutido en los últimos días sobre el tiempo necesario para aprobar una legislación complicada, como la derogación y reemplazo de Obamacare
“Si Obamacare está perjudicando a la gente, y lo está, ¿por qué no debería dañar a las compañías de seguros y por qué no debería el Congreso estar pagando lo que el público paga?”, dijo Trump.
El Senado decidirá el martes si empieza a debatir una ley de salud, y el líder republicano en esa cámara, Mitch McConnell, prometió un debate “intenso” y un proceso abierto de modificaciones.
Trump, que se mostró decepcionado, sugirió que la Casa Blanca puede dejar que naufrague el mercado de seguros de salud que considera Obamacare para entonces buscar una negociación con los demócratas.
A otros senadores, entre ellos Murkowski, les preocupan los subsidios mucho más escasos del proyecto para muchas personas pobres que ahora reciben servicio de las bolsas de la Ley del Atención Sanitaria Asequible.
Pronto, Obamacare puede ser una cosa del pasado. Los republicanos del Senado, que regresaron de su descanso del 4 de julio, reanudaron las negociaciones para reemplazarla por una legislación que podría conducir a que 15 millones de personas menos estén aseguradas el año próximo y 22 millones menos para 2026.
El último proyecto de ley de salud planteado en el Senado provocaría que unos 22 millones de personas perdieran la cobertura médica antes de 2026, entre ellos 6 millones de hispanos.
McConnell y otros líderes republicanos llevaban días ejerciendo presión para lograr los apoyos necesarios para aprobar la legislación, pero parece que aún no han conseguido los votos suficientes.
El mayor número de personas sin seguro resultaría de los recortes a Medicaid que, según propone el Partido Republicano, serían de US$ 772,000 millones en una década.
Dean Heller, de Nevada, es el quinto senador republicano en declarar su oposición al actual plan del Partido Republicano para reformar el seguro de salud de Estados Unidos.
El borrador contempla sólo US$ 2,000 millones para los programas relacionados a los opioides, cifra que tranquilamente se puede aumentar para conquistar a los republicanos de la región central del país.
VÍDEO. Los demócratas, por el contrario, están unidos en su oposición a la medida, que fue elaborada en secreto por un grupo liderado por el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell.
Los senadores aprobaron casi por unanimidad esta propuesta de ley que también intensifica las sanciones a Irán. El texto debe ser ahora aprobado por la Cámara de Representantes, donde su futuro es incierto.
Un consultor de Washington cuyos clientes trabajan en estrecha colaboración con el gobierno dijo que los tuits alimentan una sensación de que la Casa Blanca está perdiendo el rumbo.
La decisión de Estados Unidos podría tener enormes implicaciones para el pacto, que depende en gran medida del compromiso de los grandes países contaminantes para reducir las emisiones de gases.